Siempre basamos nuestro estado de animo en el amor, ese amor de aquella persona que amamos, que apreciamos, que adoramos con todo lo que somos. Y no es así, tenemos el amor, el aprecio, y la adoración de nuestra familia, y nuestros amigos. No digo que jamás sufrí por alguien y no sentí que todo se venia abajo porque esa persona no quería algo de mi. Lo viví, lo sentí y hoy sé que el amor por una persona que te hace sufrir no es más que desperdiciar tiempo, por eso "en verdad no tengo tiempo que perder".
No me las sé todas, solo tengo 15 años.
No te puedo decir más que esto por hoy.
Para mí por hoy aprendí algo más, mañana sabré más y te lo voy a saber contar.
carolina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario